El primer paso es cepillar o frotar el cuerpo del animal con un cepillo llamado rascadera que debe moverse en pequeños círculos a favor de la dirección de crecimiento del pelo; este proceso suaviza el pelo y estimula el flujo de la sangre a través de la piel del caballo.
Después de montar, el caballo se debe mojar con agua fría utilizando una esponja, luego se cepilla, se cubre con una manta y se le obliga a caminar hasta que se seque. Si el caballo está demasiado caliente y sudoroso, el jinete debe quitarle la silla y la brida, cubrirlo con una manta, darle un poco de agua y hacerle andar hasta que se recupere.
La alimentación adecuada para un caballo de montar depende de su raza y del tipo de trabajo que desarrolle.Sus comidas pueden consistir en 134 o 202 medidas secas de grano o pienso dulce mezclado con pequeñas cantidades de maíz y harina de linaza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario